Decisión correcta.

Pensar una y otra vez sin convicción: "He hecho bien", porque has tomado una decisión en caliente y cuando lo piensas en frío te das cuenta que has cometido un gran error pero te esfuerzas en negarlo con todas tus fuerzas, pero a veces es necesario recordarnos a nosotros mismos que las decisiones tomadas son las correctas, porque aunque se diga que las decisiones en caliente siempre están mal tomadas, es mentira, las decisiones en caliente suelen ser la clase de decisiones de las que al principio te arrepientes y al cabo del tiempo te das cuenta que fueron las mejor tomadas, las que realmente te han venido bien para avanzar porque pensar en caliente te proporciona respuestas rápidas e instintivas y esas son las respuestas arriesgadas, las que después de tomarlas te sientes liberado y es como si saltaras de un precipicio, te tiras y es como volar, esa sensación tan placentera de volar.